Posfechada

Con los años vienen las sospechas (serán también los remordimientos), qué sé yo. Lo que sí sé es que los días sirven para enumerar los aciertos y –también- los desaciertos. Hay una lista infinita de cosas que somos, que nos…

Tu última siesta Tata.

Te nos has ido, no al mundo ni a su gente sino a nosotros. No sabemos a dónde ni con quién o hasta cuándo. Pero los días ahora serán distintos -cómo no podrían ser distintos-. Fuiste, en el más grande…

El precio del mañana.

No voy a mentir, soy un excelente aceptador de regalos. Me forjé bajo la fehaciente idea de que recibir es exponencialmente mejor que dar. Quién diga lo contrario pues da mucha flojera. Que sí, que hay excepciones –nada en esta…

El arte de las cosas inconclusas.

No busco ser libre ni cien años de amor contigo, solo quiero tomarte de la mano. Hace ya algunos viernes (5 quizá 6 años de interminables viernes) me brotó esa frase en medio de unas cervezas y Calamaro a mitad…

Las raíces de la felicidad.

En términos amplios, las injusticias y los contextos deteriorados de nuestras «existencias» no se traducen necesariamente en sinónimos vivibles de angustia, tristeza o desolación. Una contradicción silogística si se quiere argumentar. La miseria produce miseria: sí y no. La miseria…